Las buenas fiestas se agradecen

Gracias. Esta fue la mejor versión de la Fiesta del Libro y la Cultura de Medellín en la que hemos participado. Durante diez días fuimos testigos de una ciudad viva y alegre, de una ciudad que está transformándose a través de la cultura. Además de convertirse en la casa de los libros, el Jardín Botánico sirvió de escenario para que autores, ilustradores, músicos, dramaturgos, bailarines y cuenteros compartieran su arte con casi 400 mil ciudadanos.

La Fiesta del Libro de Medellín tiene algo extraordinario, un espíritu que no hemos visto en eventos de otras ciudades ni países. Aquí se está generando un cambio, se está señalando un camino que empieza en el encuentro con el otro. Esa es la naturaleza de los libros, mostrar que la humanidad puede convivir en un mismo espacio, que las fronteras son imaginarias y que las diferencias enriquecen. Cuando una comunidad entiende eso, celebra, y eso es lo que acabamos de vivir, una fiesta.

Ahora que estamos de vuelta en la oficina queremos agradecer. Gracias a todo el equipo organizador y logístico: hicieron un trabajo impecable. A todos los editores, libreros y distribuidores que asistieron, gracias por creer en Medellín y en sus lectores. Gracias a la ciudad en general, a los niños, los jóvenes, los maestros, las familias que fueron a disfrutar de la Fiesta. Y, sobre todo, gracias a cada uno de los que visitó nuestro stand, gracias a cada lector de Tragaluz porque nos inspira a seguir haciendo lo que hacemos: a ustedes les quedan nuestros libros, a nosotros nos queda la gratitud. ¡Desde ya estamos esperando la próxima Fiesta!